En los últimos años, el renting se ha venido popularizado, especialmente por los precios asequibles y por otras interesantes ventajas. Gracias a este tipo de servicios, es posible tener acceso a cualquier clase de coche con tan solo hacer un clic, y esto sin la necesidad de hacer un gran desembolso inicial de dinero. También es atractivo para muchas personas por el hecho de que no representa una inversión imprudente o un gran gasto que se pueda volver insostenible a largo plazo.
No tendrás que desembolsar una gran cantidad de dinero
Cuando contratas un servicio de renting, solo debes cancelar la cuota que te corresponde por inicio del negocio, y no una cuota alta, como sí ocurre al comprar un coche. De este modo, no tendrás que preocuparte excesivamente por el dinero.
Precios asequibles
Comprar un coche puede ser costoso, sin embargo, los que se ofrecen en la modalidad de renting tienen precios mucho más asequibles, incluso si se trata de un modelo nuevo, con tecnología avanzada o con pocos años en el mercado.
Pólizas de seguro incluidas
A algunas personas se les hace difícil asegurar su coche con una póliza que cubra todo tipo de riesgo. Debido a esto, muchos choferes se deben conformar con pólizas más asequibles, pero que no tienen una cobertura sobre todos los daños del coche. Afortunadamente, otra de las ventajas del renting para particulares que le hacen muy atractivo es el poder disfrutar de un seguro completo, cuyo coste va incluido en la cuota que pagarás cada mes.
No tienes que preocuparte por pagar las averías o los gastos de mantenimiento
Todos los vehículos necesitan que se le haga una que otra reparación cada cierto tiempo, es decir, mantenimiento. Y esto es así, aunque el coche sea nuevo y se haya sacado directamente de un concesionario, pues es importante que se realicen revisiones y los cambios que necesite con el paso del tiempo.
Cuando el coche es propio, tener que gastar en esto puede ser una molestia. Y lo es mucho más cuando las fallas aparecen de improviso, puesto que pueden desequilibrar tus finanzas.
No obstante, el renting de vehículos no te carga con ninguna de estas preocupaciones, pues este tipo de gastos no corren por tu cuenta. O sea, que con este servicio te ahorras tener que pagar por la reparación de averías, porque en el contrato se incluyen, de tal forma que no tengas que hacer frente a gastos repentinos.
Podrás cambiar de coche con la frecuencia que quieras
Cuando haces la compra de un coche, debes estar consciente de que lo tendrás por un largo tiempo. Sin embargo, con la contratación de un servicio de renting puedes cambiar tu vehículo en unos pocos años. De hecho, cuando firmas tu contrato quedan abiertas tres opciones, estas son:
- Devolver el coche si eso quieres.
- Continuar con el contrato. Para lo que debes pedir una prórroga. En algunos casos y dependiendo de tu proveedor, puedes tener la opción de comprarlo.
- Renovar el servicio, pero con otro coche de renting que elijas, de este modo disfrutarás siempre de un automóvil nuevo, seguro y actualizado.
Gracias a estas tres opciones que ofrece el renting, puedes probar y explorar diversos tipos de coches según sean tus gustos y necesidades del momento.
Por ejemplo, es común el caso de personas que hacen un contrato de alquiler cuando no tienen hijos, pero luego la familia crece y sus requerimientos cambian, por lo que van a necesitar un coche más grande para que quepan todos. Es en estos casos en donde te das cuenta de que contratar un servicio de renting te da más flexibilidad y se acopla a ti y a las exigencias de tu familia.
Asistencia en carretera
Normalmente, los contratos de renting incluyen un servicio de asistencia en carretera las 24 horas del día, los 365 días del año, de manera que, en caso de cualquier imprevisto durante la conducción, por ejemplo, un pinchazo en uno de los neumáticos o un accidente, puedes ponerte en contacto con el servicio de asistencia y recibir ayuda.